Me decido a escribirte esto para hacer más firme este pensamiento que me viene rondando desde hace algún tiempo.
No estaba muy segura, pero pienso que al hacerlo público aquí adquiere, al menos para mí, la dimensión de cierto compromiso y, aunque suene fuerte, te lo digo una vez más: lo nuestro no funciona y, lo que es peor, aunque viviese una eternidad, estoy convencida de que eso nunca iba a suceder.
Son ya muchos años dejándonos, para luego retomar la relación al cabo de un tiempo; hasta podría precisar cuántos porque llevo perfectamente la cuenta...
He de reconocer el mérito tuyo de volver siempre a mí; pero no quiero que te engañes, ninguna de las veces te he recibido con los brazos abiertos, ni siquiera esta última en la que has sido más condescendiente.
¿Y sabes por qué? porque nunca te defines y yo no puedo con tus veleidades, tus cambios de humor y tu casi frialdad que a todos escondes con un barniz de romántico empedernido. Lo he intentado pero me doy ya por vencida contigo.
Alejémonos de nuevo un tiempo, no sin antes
darte las gracias por los momentos buenos que me has regalado, como cuando me has traído granadas para postre y castañas con las que calentarme las manos.
Hoy te digo adiós pero estoy segura de que volverás a llamar a mi puerta cuando me abandone ÉL, mi deseado verano.
No estaba muy segura, pero pienso que al hacerlo público aquí adquiere, al menos para mí, la dimensión de cierto compromiso y, aunque suene fuerte, te lo digo una vez más: lo nuestro no funciona y, lo que es peor, aunque viviese una eternidad, estoy convencida de que eso nunca iba a suceder.
Son ya muchos años dejándonos, para luego retomar la relación al cabo de un tiempo; hasta podría precisar cuántos porque llevo perfectamente la cuenta...
He de reconocer el mérito tuyo de volver siempre a mí; pero no quiero que te engañes, ninguna de las veces te he recibido con los brazos abiertos, ni siquiera esta última en la que has sido más condescendiente.
Alejémonos de nuevo un tiempo, no sin antes
darte las gracias por los momentos buenos que me has regalado, como cuando me has traído granadas para postre y castañas con las que calentarme las manos.
Hoy te digo adiós pero estoy segura de que volverás a llamar a mi puerta cuando me abandone ÉL, mi deseado verano.
¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡Ayyyyyyy me encanta!!!!!
ResponderEliminarY además lo suscribo, jejejeje.
He disfrutado un montón, empiezo bien el día, jejeje.
Besos y feliz miércoles.
Me han alegrado mucho tus palabras, y veo que lo has pillado, Gema ;-)
EliminarUn besito y Feliz Navidad, guapa
Por dios. Ya estaba pensando yo qué granuja sería este personaje que tanto te abandona, baja. Bonito relato, pero yo me quedo encantada con este invierno. Besos
ResponderEliminarPara gustos, colores. Yo es que llevo muy mal el frío, Marina. Y lo curioso es que paso de Guatemala (otoño) a Guatepeor (invierno) ;-)
EliminarUn beso, linda
Pues voy a ser yo el primero, ya que he tenido el honor de enterarme de primera mano (con cortecillo incluido, por cierto), en decirte lo precioso que es este "Sin ti" que has publicado. Al final lo he comprendido... ¡Qué deleite leerte! Como lo es también escuchARTE...
ResponderEliminarFeliz invierno Artista!!
Y tanto que te has enterado de primera mano...¡nadie diría que me ha faltado tiempo en decírtelo!
EliminarLa verdad, me ha gustado mucho que te pusieras manos a la obra a comentar, y lo que no esperaba es que el texto llegara a iluminARTE y te fuera tan útil como resultó ser.
Mil gracias a ti por leerme y por tus bonitas palabras. Te mando un abrazo muy fuerte.
Hablando del invierno, para aquellos a los que no les gusta y el lo sabe, cuando se marcha lo hace dejando aromas y luz. Un abrazo
ResponderEliminarEstaré atenta a lo que dices, Ester, aún falta para ello pero lo recordaré.
EliminarUn beso
Últimamente me he vuelto tan suspicaz que son sólo leer las primeras líneas de un texto aparentemente muy romántico, o dramático, ya sospecho que puede haber gato encerrado, un gato con sorpresa final, jeje.
ResponderEliminarY en este caso he acertado. Ay, el verano, que nos seduce tanto, que nos brinda tantos placeres, es un amante dulce y agradecido mientras dura la relación pero que también nos abandona para volver, al igual que la primavera, el otoño y el duro invierno. A éste le cerraría la puerta con doble pestillo.
Me ha encantado esa declaración de intenciones tan bien narrada.
Un abrazo.
Adoro el verano, Josep, y cuando se marcha me quedo igual que una amante despechada ;-)
EliminarAhora es el otoño el que se va, pero es que a mí los encantos del otoño no me acaban de seducir.
Eres muy hábil, como buen contador de historias, así que no me extraña que pillaras el final antes de tiempo, ¡gracias por tus palabras!
Un beso
Despedida al Otoño, una forma preciosa de hacerlo, gracias Chelo por algo tan bonito. Un beso muy fuerte. TERE.
ResponderEliminarGracias a ti como siempre, por tus palabras, Tere. Espero que estés mejor ya.
EliminarUn besazo enorme
Buenos días guapi! Quien dijo que el desamor no tiene ese lado hermoso? Y más cuando es transmitido en palabras tan hermosas como las tuyas!
ResponderEliminarEs triste, pero escrito con alma y corazón.
Desearte ya a estas alturas una feliz Navidad! Disfrútala!! Con tu gente, los que te quieren de verdad!!
Feliz año nuevo! Como dice la canción...Otro amor vendrá!
Besotes grandes!!
¡Hola Gema! Gracias mil por tus palabras, que sí son bonitas.
EliminarMe hace gracia que no me hayas pillado pues estaba hablando del otoño. Te confiesto que no sé si me atrevería a hablar aquí en público de otro tipo de ruptura ;-)
Feliz año también para ti, preciosa, ¡un beso muy fuerte!
Pd: Espero que hayas pasado una bonita Navidad.
Hola guapa! :) ante todo, FELIZ AÑO NUEVO! Oix! Te he vuelto leer! Y no se porqué me empeñé en que detrãs de esa despedida otoñal, había un desamor, un desahogo profundo que me impactó! Menos mal que estaba equivocada!
EliminarCambiando de tema! He pasado buenas Navidades! Espero que tu también hayas pasado unas fantásticas fiestas! A ver si retomo la rutina y actualizo mi blog!
Besazos guapísima!!!
La intención era 'confundir' y contigo lo conseguí. Eso es positivo, Gema ;-)
EliminarMe alegra enormemente que hayas venido otra vez, y aún más que hayas pasado unas buenas Navidades. Yo también, aunque hoy se me acaban las vacaciones y ya ya retomo el blog.
¡Un abrazo muy fuerte! y espero leerte pronto, con la energía que te caracteríza.
Hola! Que bonito, me ha encantado!
ResponderEliminarUn saludo!
Muchas gracias, Bea, siempre tan amable con mis posts...
EliminarUn beso enorme
¿Y te has reafirmado?
ResponderEliminar¿En el abandono al otoño? ¡y tanto que me he reafirmado, Tracy! No me queda otra ;-)
EliminarUn beso
jijijiji ains... mira que llega a ser malo y cruel el frío! :) Ya haces bien en decirle cuatro verdades, ¡que se habrá pensado!
ResponderEliminarMe ha encantado Chelo, :)
Y confieso que yo y el verano muy amigos no es que seamos, pero este frío que viene de golpe y casi no te da ni tiempo a reaccionar tampoco me agrada.
Muchos besos y Felices Fiestas, (con abrigo incluido)
¿A que sí, Irene? gracias por comprenderme ;-), y sobre todo por tu comentario.
EliminarYo sí adoro el verano, y es que a mí nunca me agobia el calor; en cambio el frío me acobarda mucho.
Un montón de besos, linda (con abrigo y bufanda, por supuesto).
Pues dirás lo que quieras pero el amante otoño tiene su belleza romántica, su encanto colorido, sus sentimientos atemperados y su constancia como compañero anual que regresa fiel a la cita de las estaciones como el tren que viene para que te subas o te apees de él. Es constante en su amor.
ResponderEliminarYo me quedo con lo mejor de él que después el verano luminoso y acalorado te deja exhausto de ajetreos y quemado con sus caricias desaforadas. Me gusta cambiar de pareja de baile. es más enriquecedor y satisfactorio.
Preciosa reflexión relatada.
Besos al final del otoño. ¡Abrígate!
Sí, sí, si no te niego la belleza romántica y la constancia del otoño, Francisco. Pero también es constante el amor del verano, con su calidez y luminosidad, y con la compañía del mar. Hay un dicho que en valenciano dice: "A l'estiu, tot el món viu" (="en verano todo el mundo vive").
EliminarTus palabras ya me abrigan, ¡gracias por ellas!.
Besos (ya iniciado el invierno).
Pues no tengas duda el verano nos de´jo ya hace algunos meses. Hoy comenzó el invierno y falta la mitad del año para que vuelva a aparecer. Como me gusta el verano. Un abrazo y ¡¡Felices Fiestas !!
ResponderEliminarClaro, Mamen, yo hablaba del otoño, que nos dejó hace pocos días. Cierto que aún queda mucho para que vuelva a por nosotras el amante verano que, como leo, compartimos ;-)
EliminarUn beso muy fuerte y felices días también para ti.
Si cambias de opinión y gustas de un sofocante encuentro con tu deseado verano, querida Chelo, vente a Buenos Aires por estos días y será todo tuyo, en su máximo esplendor.
ResponderEliminarTe deseo muchas felicidades en estas Fiestas que se aproximan.
Un beso grande!
Fer
Qué envida me das, Fer. Si estuvieras más cerquita para allá que me iba a verle en su 'máximo esplendor'.
EliminarMuchas gracias por tu felicitación, te mando un abrazo enorme y te deseo también lo mejor.
Ay, Chelo!! qué bonita esa carta al otoño. Y qué bien definido queda. Me ha encantado, de verdad. Me ha sorprendido porque pensaba que iba de otra cosa y cuando he visto a qué te referías, lo he vuelto a leer y me he dado cuenta de que es perfecto. Enhorabuena, amiga. De lo más logrado y hermoso.
ResponderEliminarUn beso muy grande.
Ohhh... que me digas que te parece 'perfecto' me llena de satisfacción, querida Rosa.
EliminarDudaba si quedaría claro que se trata de una cartita a este amante (bandido, para mí), pero veo que sí.
Gracias mil por tu comentario, ¡te mando un abrazo muy fuerte!
Chelo
ResponderEliminarHas jugado al despiste en esta carta a un amor y de amor es, pero al bendito verano, ¡cómo se le echa de menos! Yo también soy de verano, me encanta.
Me has despistado bien, buena discípula le ha salido a nuestro querido amigo Francisco, todo se pega.
Mis mejores deseos para ti y los tuyos para estas fiestas. Disfruta mucho con aquellos a los que quieres, estas fiestas son de ellos, sobre todo de los peques.
Un petonàs guapísima
Qué bueno, Conxita, me encanta haberte despistado y que me consideres buena discípula de nuestro común amigo, Francisco (eso es que es un buen maestro, aunque siempre me diga que exagero).
EliminarContigo coincido en muchas cosas y una más es ese 'amor' por el plácido verano.
Gracias por tus deseos, amiga. Lo mismo para ti y tu familia en estos días y en el nuevo año.
¡Un beset molt fort!
¿Es una despedida al otoño?¿Ante él te sientes vencida? Bueno, como en Canarias vivo en primavera o verano semieterno, yo recibo al otoño y al invierno con mucha alegría, porque no terminan de llegar del todo, solo me rozan, y me dejan con ganas. Un abrazo fuerte, Chelo. Y feliz Navidad.
ResponderEliminarSíii, es una despedida al otoño, Ángeles. No es que me sienta vencida por el otoño, es que ya me rindo en ese empeño de 'quererle' un poco más. Como todo, lo que es forzado no funciona ;-)
EliminarOtro abrazo para ti, y que pases unos preciosos días con ese calorcito canario que tanto me gusta.
Es bueno plasnar lo que uno siente en palabras para reforzarlas y darse cuenta de que a veces es mejor pasar oagina que volver a caer en los mismos errores.
ResponderEliminarBesos
Dices una verdad como un templo, Ilesin, pero, aunque hablo de una realidad, es bien distinta a la que crees ;-)
EliminarUn beso muy fuerte y gracias por venir.
¿Lo escrachás en público y no le decís adiós porque sabés que va a volver? Sos muy malvada.
ResponderEliminarSaludos.
Ay, Raúl, que no entendiste nothing.
EliminarHe tenido que buscar en Google el significado de "escrachás" en Argentina, y parece que significa "romper, destruir, aplastar".
Si hay parejas que rompen por teléfono, ya solo faltaba hacerlo a través de 'blogger' ;-)
Yo hablaba del otoño, amigo, y sí, sé que indefectiblemente va a volver.
¡Besos de una malvadaaa!
Maldita sea, ¡qué gran entrada! Lo mío con el tío winter tampoco funciona.. 40 de fiebre y en camita que he estado estos días. Dichoso frío, dichosos virus, y dichosos los 400000 millones de peatones que invaden la Gran Vía xD
ResponderEliminarEspero que ya estés mejor, Holden, ¿a quien se le ocurre ponerse malo en estas fechas? ves, es lo que tiene el dichoso frío ;-)
EliminarMe alegra que te haya gustado, y sobre esos peatones de que hablas, paciencia...
Un beso
¡Hermoso texto!, Chelo. Una despedida con la pena de la sinceridad, la hora de las palabras tristes de los amores contrariados. Uno se deja llevar por el relato de la culminación de una historia de amor y de repente la historia rota hacia el final inesperado y caemos en la cuenta de que en la realidad se trata solo de los vínculos de la Naturaleza, de la alternancia de las estaciones. Ha sido un placer leerte. Tienes una narrativa clara que atrapa del principio. Me encantó.
ResponderEliminarMis mejores deseos para ti, que pases una ¡feliz Navidad!
Un beso.
Ariel
Muchas, pero que muchas, gracias. Eso pretendí, Ariel, que pareciera el fin de una relación amorosa y, así, poder causar sorpresa. Si en ti lo he conseguido, me siento muy halagada.
EliminarQué bonita expresión esa que usas, "la hora de las palabras tristes"...
Siempre es un placer recibirte, y yo también te deseo lo mejor para ti en estas fechas y con la llegada del nuevo año.
Un beso, Ariel.
hermoso! siempres prendes flores en el alma de las personas con tus letras. gracias y un fuerte abrazobuho!
ResponderEliminar'Prender flores en el alma con las letras'...¡me encanta! hacéis que me ruborice, Buhítas, muchísimas gracias a vosotras.
EliminarOs devuelvo un abrazo bien fuerte y por duplicado.
Muy bueno ese final . feliz Nabidad para ti y los tuyos . un fuerte abrazo .
ResponderEliminarMuchas gracias, tocaya, por tus palabras y por tu felicitación.
EliminarTambién yo te deseo lo mejor, a ti y a los tuyos.
¡Un abrazo!
Vaya, cómo me has engañado, puñetera. Creí que esa carta tan llena de sentimiento y cierto resquemor iba dirigida a alguien de carne y hueso.
ResponderEliminarAhora que sé quién es tu amante despechado te diré que no se lo merece, es un romántico empedernido pero no por disfraz sino por esencia. Aprovecho este comentario para dirigirme a él y para decirle que yo siempre estaré esperando su regreso con los brazos abiertos y que mientras vuelve echaré de menos sus colores ocres, su nebulosas melancolías y su olor a tierra mojada.
Precioso texto, Chelo, aunque no comparta tu resquemor hacia "él".
Besos.
Cómo me complace haberte confundido un poco, compi.
EliminarSi te parece precioso mi texto, a mí me lo parece tu comentario y los piropos que echas a tu deseado otoño.
A pesar de ellos y de otras cualidades, a mí sus 'veleidades' no me gustan, ni en el otoño ni en las personas, y lo sabes. Quizás de ahí venga el 'resquemor' ;-)
¡Muchos besos para ti, querida amiga!
Tienes toda la razón, Julio D. el cambio climático está acabando con lo característico de cada estación y llegará un punto en que nos resultarán confusas y tan solo nos guiaremos por lo que sentimos o vemos: frío o calor, colores ocres o paisajes floridos, etc.
ResponderEliminar¡Felices fiestas y todo lo mejor para el nuevo Año, Julio!